Cuando estuve en el Handmade Festival, a finales de abril, descubrí una herramienta para trabajar absolutamente versátil y práctica: los rodillos con patrón o patterned paint rollers.

Estos rodillos los encontró Clare Bosanquet de The Painted House en un viaje que hizo a Rumanía y se sorprendió al saber que allí los estaban utilizando desde hacía unos 100 años como alternativa al papel de pared.

Desde entonces Clare no ha dejado de trabajar y experimentar con estos rodillos para devolver a la vida viejas paredes, telas y muebles.

El sistema consta de un mango en el que se fijan dos partes, una el rodillo con patrón y otra el aplicador de pintura, del que hay dos versiones, para tela o para papel, madera y pared.

Hay 18 diseños diferentes y el resultado es una pasada, yo me los compraría todos 🙂

Si quieres saber más sobre estos rodillos tan chulos entra en The painted house.